Una historia extraordinaria
Por JtvLion:
La historia que aparece a
continuación es un clásico de Internet. Ha circulado y aun lo hace por la red
en multitud de variantes. Apareció originalmente en la revista Saturday
Review, el 21 de Diciembre de 1968. Su autor es un profesor americano de
física llamado Alexander Calandra. Me ha gustado tanto y es tan
maravillosamente excepcional que no pude resistir la sensación de tomarlo y
publicárselo a ustedes, de manera que tengan la oportunidad de disfrutarlo como
yo lo hice. La verdad es absolutamente encantadora y no tiene desperdicio el
ingenio intrínseco en ella. Aquí les va.
Ángeles en un alfiler
Una parábola moderna
Hace algún tiempo recibí una
llamada de un colega que me pidió si podría servir como arbitro en la
calificación de una pregunta de examen de física. Le iba dar un cero a un
estudiante por su respuesta a una pregunta, mientras que el estudiante
argumentaba que debería recibir la máxima nota, de modo que asumía que así
sería si el sistema docente no se hubiera organizado en contra de los
estudiantes: El profesor y el estudiante acordaron acudir a un árbitro
imparcial, y de esta manera… me eligieron a mi.
Acudí al despacho de mi colega y
leí la pregunta del examen: "Demuestra
como se puede determinar la altura de un edificio alto con la ayuda de un
barómetro"
El estudiante había contestado: ─"
Lleva un barómetro a lo alto del
edificio, átale una cuerda larga, haz que el barómetro baje hasta la calle.
Mide la longitud de cuerda necesaria. La longitud de la cuerda es la altura del
edificio"
Quede admirado por la respuesta
del estudiante, y advertí que realmente tenía derecho a una buena nota ya que
había contestado a la pregunta correctamente. De modo que, si se le asignaba
una buena nota, contribuiría a que recibiese una buena calificación en su curso
de física. Se supone que una buena calificación certifica competencia en
física. Sin embargo, dado los patrones a seguir para calificar dicha respuesta no
cumplía –inesperadamente- con el mínimo requerimiento necesario y por lo tanto
no se correspondía con esto. Sugerí entonces que se le diera al estudiante otra
oportunidad para contestar a la pregunta. No me hubiera sorprendido si mi
colega hubiese estado de acuerdo. No obstante, sí lo hizo, lo cual contribuyo a
que el alumno también lo estuviera.
Le di al estudiante seis minutos
para responder a la pregunta con la advertencia de que la respuesta debía
mostrar su conocimiento de la física. Al cabo de cinco minutos, no había
escrito nada. Así que le pregunte si se daba por vencido, a lo que me contesto
que no. Tenía muchas respuestas al problema; estaba buscando la mejor. Al minuto
siguiente escribió de prisa su respuesta la cual decía lo siguiente:
"Lleva el barómetro a lo alto del edificio y asómate sobre el borde
del tejado. Deja caer el barómetro, midiendo el tiempo de caída con un
cronómetro. Luego usando la fórmula S=1/2 at2, calcula la altura del
edificio.
En este momento le pregunte a mi
colega si estaba convencido de la respuesta ─ ¡yo no tenia la menor duda!─ De
modo que estuvo de acuerdo y le dio al estudiante la máxima nota.
Al salir del despacho de mi
colega recordé que el estudiante había dicho que tenía otras muchas respuestas
al problema, así que no pude resistir la tentación y le pregunte cuales eran. "─Oh, si, dijo el estudiante. Hay
muchas maneras de determinar la altura de un edificio alto con un barómetro.
Por ejemplo, coges el barómetro en un día soleado y mides la altura del
barómetro, la longitud de su sombra, y la longitud de la sombra del edificio;
luego usando una simple proporción, determinas la altura del edificio."
─"Vaya, es admirable, le
respondí. Excelente… ¿y las otras?"
“─Si, dijo el estudiante. También
puede usar un método muy simple que estoy seguro le gustará. En este método, se
toma el barómetro y se comienza a subir las escaleras. A medida que se van
subiendo las escaleras, se marca la longitud del barómetro a lo largo de la
pared. Luego se cuenta el número de marcas y esto dará la altura del edificio
en unidades barométricas. Un método muy directo y simple al mismo tiempo."
Y agrego: "─Desde luego, si quiere un método más sofisticado, puede atar el
barómetro al final de una cuerda y balancearlo como un péndulo; de esta forma
puede determinar el valor de ‘g’ a nivel del suelo y en la parte superior del
edificio. Luego, haya la diferencia entre los dos valores de ‘g’ y ya se puede
calcular la altura del edificio."
Finalmente, concluyó, "─hay muchas otras formas de resolver
el problema. Probablemente la mejor, -dijo, es llamar en la portería.
Cuando abra el portero, le dices lo siguiente: Sr. portero, aquí tengo un
barómetro excelente. Se lo daré sin costo alguno, si me dice ahora mismo cual
es la altura de este edificio."
Niels Bohr |
En este momento le pregunté al
estudiante si conocía la respuesta convencional a la pregunta. Reconoció que si
y agrego: ─la diferencia de presión
marcada por un barómetro en dos lugares diferentes nos proporciona la
diferencia de altura entre ambos lugares. Evidentemente, estaba en lo
cierto, pero me confesó además que estaba harto de que los profesores del
instituto y de la facultad trataran de enseñarle como tenía que pensar usando
el "método científico" y a
explorar la lógica profunda de la materia de una manera pedante y aburrida,
como se hace a menudo en matemáticas, en lugar de enseñarle la estructura de la
materia y su esencia. Teniendo esto presente, decidió recuperar el
escolasticismo como un asunto académico para desafiar las atemorizadas aulas de
física del mundo.
Y yo quede convencido de la capacidad
infinita que tiene la mente de los genios a la hora de hacer razonamientos
lógicos y conclusiones acertadas, sin tanta parsimonia o extrema sobriedad
académica. Su nombre era Niels Bohr,
físico danés, premio Nobel de Física en 1922, mas conocido por ser el primero
en proponer el modelo de átomo con protones, neutrones y los electrones que lo
rodeaban. Fue fundamentalmente un innovador de la teoría quántica. Créanme:
Muchas veces las complejidad de los eventos que nos rodean tienen envuelto en
si mismos las respuestas mas sencillas y racionales.
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